El pasado Miércoles 27 de Mayo tuvimos la oportunidad gracias al concesionario Mercedes-Benz Autolica Tarragona de probar durante una día el modelo clase GLA 220 CDI.
Un vehículo derivado del modelo clase A aunque con muchas diferencias, principalmente tiene una línea distinta, la trasera es nueva, enfocando la seria A compuesta por el clase A, CLA, CLA Shooting Brake y GLA hacía otros mercados. Catalogado por Mercedes-Benz como un SUV de pequeñas dimensiones es capaz de transmitir más sensaciones de las que uno se puede imaginar.
La primera sensación interior
En el interior te encuentras rodeado de amplitud, confort y calidad, ya sea en los asientos, como en el bastidor. Los plásticos son de una calidad indiscutible, el salpicadero, conductos de ventilación se aprecia que han dado un cambio radical a Mercedes-Benz, destacando la cantidad de pequeños compartimentos que nos podemos encontrar por todo el interior del vehículo.
El maletero es de mayor capacidad de carga respecto al modelo clase A el cual tiene 341L y el GLA dispone de 421L. La pantalla central es de muy buena calidad incluso cuando le da un poco de sol, la seguimos viendo nítida. El cuero del volante tiene un tacto muy agradable, dejando bien visible la relojería con un toque de deportividad.
Ahora toca moverse
Es hora de arrancarlo, hay que remarcar que se trata del modelo automático. El comportamiento por ciudad es muy suave. Además cuenta también con el sistema star/stop con el que se apaga el motor cuando el vehículo se detiene ante un semáforo y lo enciende automáticamente cuando el conductor decide seguir; de esta forma se reduce tanto el consumo de combustible como emisiones de CO, especialmente en ciudad. Definitivamente es un coche muy suave y agradable de conducir.
Ahora toca ver como se desenvuelve en carretera
Este modelo desarrolla 170CV y hay que decir que hacen acto de presencia, es un motor con fuerza y el cambio automático 7G-DGT exprime el motor para aprovecharlo todo lo posible, en las diferentes situaciones que el conductor quiera ponerlo, ya sea entre el tráfico de la ciudad como en la montaña.
Veamos el exterior
Se trata de una variante del modelo clase A con el que comparte muchas similitudes y a la vez muchas diferencias.
Principalmente vemos que se encuentra más elevado del suelo, aportándole una estética SUV. El parachoques delantero presidido por la estrella, se impone allá por donde pasa, y las ópticas de estética deportiva, que ya son sello de la casa, son el inicio de las líneas que van dando forma a lo largo de todo el coche hasta prolongarse con las luces de freno.
Las ruedas destacan por las llantas de 5 radios dobles con el interior de color negro como los retrovisores. Dando al conjunto del vehículo una estética mucho más deportiva. Cabe destacar que es una línea atractiva, se hace notar cuando se mueve entre el tráfico.
Hoy en día los patrones del mundo del automóvil se rigen por los grandes grupos, y ver como una marca de renombre como Mercedes se haya atrevido hacer un cambio tan radical en todos sus modelos, es de agradecer. Ha sido una apuesta que les ha llevado al caballo ganador, sin duda. Los números de ventas hablan por si solos. Han sabido abrir mercado e ir a por otros clientes, que anteriormente no se planteaban comprarse un coche de la casa alemana, pero ahora las cosas han cambiado.
Y después de un intenso día probando y realizando un sesión de fotos, debo decir que el clase GLA me ha dejado muy buen sabor de boca.